En sesión del Consejo del 21 de febrero, Lorena Muñoz Altamira asumirá la presidencia de la Cámara de Comercio de Querétaro.
Querétaro, Qro, a miércoles 07 de febrero del 2024.- “En 120 años voy a ser la segunda mujer presidenta, esto representa un reto para mí, personalmente porque el gremio está acostumbrado a tener la imagen de un presidente hombre y bueno hay que trabajar en la credibilidad, en el reconocimiento del gremio del comercio, los retos son grandes por que el 2024 será un año complicado para la economía sobre todo para las pequeñas empresas”.
Entre los retos que tiene está el fortalecer el comercio electrónico y seguir posicionando el nombre del organismo empresarial.
“Considero que hay temas que debemos empezar a trabajar con mucho mayor fuerza, como el fortalecer el comercio electrónico, pues desde la pandemia venimos arrastrando este tema y aunque hay muchas empresas se pusieron las pilas y sacaron metodologías de comercio electrónico muy favorables que las han mantenido y permitido crecer, hay otras empresas que se han mantenido de manera conservadora respecto a este tema”.
Enfatizó que se deberá analizar al mercado para determinar si verdaderamente existe la aceptación de un mercado digital o una metodología de mercado digital pues ya hay clientes de consumo que están focalizados en el comercio electrónico.
“Tenemos que apuntalar la atención de los ‘free lance’, aquellos emprendedores que trabajan en medios electrónicos, habrá que sumarlos para que cumplan con la normatividad que se ha presentados a través de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, pero también mantener a nuestro comercio tradicional son los dos ejemplos en los que se debe trabajar.
Además, dijo, es necesario seguir posicionando el nombre de la Cámara de Comercia y dar continuidad a los proyectos de comercio internacional y para ello, en abril se abrirá la segunda misión comercial a Houston, Texas.
Destacó que los retos que se tienen para el comercio durante este 2024 son complicados, ya que al ser un año electoral por la contracción del efectivo que retiran las grandes empresas, lo que afecta directamente a las economías locales.
“Este es un proceso natural durante los procesos electorales federales, ya que se genera incertidumbre y los inversionistas extranjeros detienen la inyección de capital a sus empresas hasta conocer el rumbo político que tendrá el país”.